lunes, 11 de diciembre de 2017

Cómo enseñar a estudiar

Tras este largo puente, volvemos con las pilas cargadas para hacer frente a la recta final del trimestre. En estos días se concentran muchos de los exámenes del 1er trimestre y, en ocasiones, los alumnos se ven desbordados al no saber cómo estudiar o cómo organizarse. Esta situación, causa también estrés en casa, ya que muchas veces las familias no sabemos cómo ayudar a nuestros hijos para mejorar su rendimiento académico. Por ello, desde el Departamento de Orientación, os dejamos una serie de recursos dirigidos a las familias para que estos días sean más llevaderos para todos. 


Orientanova nos ofrece una serie de pautas que podemos llevar a cabo para crear un hábito de estudio en nuestros hijos: 


  • Negociar con el niño/niña cuál será su horario de estudio. Es importante que sea siempre a la misma hora y que lo relacione con alguna actividad previa o posterior a la realización de las tareas escolares. Por ejemplo, estudiar siempre después de merendar, o estudiar / hacer deberes antes de ver su serie de dibujos preferida. Para facilitar este paso, puedes elaborar conjunto con tu hijo/a un horario de estudio, en el que queden reflejadas todas las tareas que realiza cada día de la semana por la tarde, reservando cada día un tiempo suficiente para los deberes y el estudio.
  • Preparar el lugar de estudio. Antes de comenzar con las tareas escolares, inculcar el hábito de recoger y preparar el sitio donde vaya a estudiar.
  • Eliminar todo aquello que pueda distraer, antes de comenzar con las tareas (tablets, teléfonos, muñecos, juegos, consolas, etc.)
  • Consultar la agenda, para ver qué tareas hay que realizar cada día.
  • Establecer un orden de realización de las tareas por grado de dificultad. Es mejor dejar la actividad que le resulte más fácil para el final de la sesión, puesto que estará más cansado/a y no se le hará tan pesada.
    1. En primer lugar, los deberes. Realizarlos por nivel de dificultad.
    2. En segundo lugar, estudiar lo que ha aprendido en clase cada día. Por grado de dificultad.
  • Calcular el tiempo aproximado que llevará la realización de cada actividad (tarea y estudio). Establecer descansos periódicos, bien teniendo como referencia un cambio de tarea o bien cada cierto tiempo (por ejemplo 30 minutos), esto dependerá de la edad del niño/a, nivel de exigencia de la tarea o esfuerzo que haga al realizarla.
  • Repasar lo aprendido cada día al final de la sesión
En esta página, además podéis encontrar multitud de recursos para adquirir un hábito de estudio, mejorar las técnicas de estudio, aprender a planificarse... En este vídeo se resume todas las herramientas que podréis encontrar. ¡Os animamos a visitarla!





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